Siempre en el mismo lugar
¿Te pasa de sentir que vas como «cangrejo» caminando de lado sobre algunos objetivos que te propones?
Y si, nuestra vida tiene esas ideas y vueltas, sobre eso no tenemos control.
Hoy te proponemos cambiar la mirada, en vez de evaluar si vas hacia adelante o hacia atrás… pensar en ESPIRAL (paradigma de algunos pueblos nativos)
La idea es desterrar la idea de que evolucionar es avanzar hacia adelante, en línea recta, como si todo lo que sucediera después del presente fuera mejor, superador de un tiempo que llamamos pasado.
Nuestros esquemas mentales fueron construidos bajo la lógicas de este pensamiento y proponernos seguir ese camino solo causa ansiedad, frustración y autoexigencia.
¿𝙌𝙪𝙚́ 𝙥𝙖𝙨𝙖 𝙘𝙤𝙣 𝙚𝙡 𝙚𝙨𝙥𝙞𝙧𝙖𝙡? ¿𝙑𝙤𝙡𝙫𝙚𝙢𝙤𝙨 𝙖𝙡 𝙢𝙞𝙨𝙢𝙤 𝙡𝙪𝙜𝙖𝙧?
¡Imposible! Porque aunque repitamos un contexto racional, nunca estamos siendo la misma persona. Entonces…
Retroceder para comprender, para registrar, para repetir lo que está bien, para revisar aquello que fuimos y queremos estar siendo hoy.
Avanzar para vivir nuevos momentos únicos que tienen un principio y un fin, así como las puntas de flecha, como las metas que queremos alcanzar.
Avanzar y Retroceder, dos instancias de ese espiral que nos lleva a reinventarnos continuamente en donde mirar atrás, desde esta nueva persona que somos, nos permite capitalizar la experiencia.
¿Te gusta esta nueva forma de pensar?